LA ASTROLOGIA CIENTIFICA ATLANTE

ASTROLOGIA CIENTIFICA ATLANTE

(SHATIOGLIO SHIOENTIS)

UNA GUIA PARA LA EVOLUCION DEL SER,

SABIENDO QUE EL DESTINO DE CADA UNO

ESTA MARCADO POR EL UNIVERSO

     Los habitantes de la Atlántida poseían conocimientos más avanzados sobre astronomía (ASHTONSHIO) al poseer mejor tecnología y la capacidad de viajar a las estrellas.

     Gracias a sus magníficos conocimientos aportados sobre astronomía, y sabiendo que el cosmos rige los principios de la Creación, de los destinos, las leyes, karma y dharma, entre otros, se aprovecharon de esos principios para programar su destino, cada acto a realizar, qué puede modificarse y qué no se puede, utilizando diferentes sendas para llegar a una misma meta.

    El calendario (CALERTHIS) constaba de 18 meses (WANTELES). Cada uno de estos se designaba con un nombre especial: SHENROEL, FIBREIL, MAIRC, KAIRM, KROIL, SIRTENS, THEIR, THOSPIA, SIRTERIO, CRONOMANS, ANTHIPHIARS, DIENTHIERF, DIXTER, KHALAMTHAS, DEBREYDASH, LINDASHIAMS, PHORTHES y MEDEYTREYSH. Los meses, tenían 20 días, divididos en 4 semanas de 5 días cada uno: LHENDEST, SHAMTHIAK, MIRTHYSH, LANDHAS y SHEMTHES.

    Cada 4 años se agregaba un mes de 25 días. Este décimo noveno mes se llamaba MARTENS. Los últimos cinco días eran XMALERTES (sin nombre). Cada 52 años finalizaba un ciclo sideral (MORTIAMPSH LEY BRUANTISHLUX). Aquí el décimo noveno mes agregado poseía 33 días (XMOTERPS), los últimos 13 tampoco tenían nombre y eran dedicados a las ceremonias solares, denominadas PRAXIMANES, precedidas por los Sumos Sacerdotes como honra a sus Dioses lumínicos. (Los conceptos sobre Dios y los Dioses no eran los mismos que  tenemos, ya que su conocimiento sobre los diferentes planos era más avanzado)

    

   Guiados por las constelaciones y las estrellas construyeron un calendario zodiacal, con una constelación por cada mes. Al descubrir que los nacidos en un determinado mes, eran dominados por la energía de una galaxia en particular y poseían iguales características, similares a la personalidad o inteligencia emocional de ciertos animales, en su agresividad, sentimientos o instinto, dieron a cada una de esas constelaciones, el nombre del animal que los caracterizaba, naciendo así, los signos zodiacales: Puma, Leopardo, Serpiente, Oso, León, Lobo, Aguila, Halcón, Coyote, Escorpión, Cangrejo, Cisne, Dragón, Castor, Tigre, Toro, Centauro y Zorro.

     Así mismo comprobaron que también eran influenciados por planetas, soles y la luna misma, los eclipses solares, lunares, las fases de ésta, los astros espirituales paralelos y los planetas que se hallaban más cerca por esos días, aportando defectos o agregados psicológicos, cualidades, vocaciones, etc., interactuando en su personalidad, en sus cuerpos, físico y sutiles, como también en sus destinos. Todo este conjunto de datos les obligó a organizar un estudio científico para facilitar su lectura entre las personas comunes.

     En lo relacionado con los nacidos el décimo noveno mes, se calculaba de la siguiente manera, cambiando su fecha de nacimiento, observando las conjunciones planetarias se colocaba una nueva fecha. En cuanto a los signos, eran divididos, doce días para el anterior (zorro) y trece para el posterior (puma), igualmente era para el décimo noveno mes de treinta y tres días. Dieciséis para el anterior y diecisiete para el posterior.

     Si nacía en luna llena, por ejemplo, se buscaba el mes correspondiente, anterior o posterior, el inicio de su fase lunar y daban ese día como nacimiento. Los nacidos el primero o el último día del mes, tenían características leves de otros signos, anterior y posterior.

     En su estudio completo, lectura y diagnóstico, fueron luego las sacerdotisas quienes tenían a su cargo la confección del mismo y los sacerdotes de los templos denominados, de las doce estrellas, debido a su complejidad, notándose la mayor precisión que los confeccionados por otras civilizaciones, porque se sumaron en el inicio de la elaboración de esta compleja astrología, personas que estudiaban e investigaban sobre distintas fuentes de energías, médicos, metafísicos, astrofísicos y los interesados en el estudio de la psiquis humana y sus registros álmicos, entre otros.

     Así detectaron que esas influencias astrológicas, perjudicaban o beneficiaban, del mismo modo, al cuerpo astral y le transmitían una energía emisora diferente. Agregaron luego los elementos y sub-elementos que componían químicamente cada astro y el hábitat de cada animal, el medio ambiente en que se desarrollaba el individuo, su educación y la influencia zodiacal de sus allegados, familiares, educadores, como también posibles amistades influenciantes, hasta que llega a la madurez en que queda conformada su personalidad, con vestigios de su pasado. Tomando en cuenta que, son los primeros meses del nacimiento hasta los cuatro o cinco años, en que la personalidad va formándose de acuerdo a la energía conductual de quien está más tiempo al lado del individuo. La personalidad fuerte activa del individuo, continuaba en su descendencia, hasta la tercera o cuarta generación, luego comienza a declinar.

     En todas esas investigaciones, detectaron igualmente que, había individuos en los que su signo no daba ninguna característica a su personalidad, ni tampoco de la de sus criadores. Eso le llevó a descubrir que eran las características del propio espíritu que estaba influenciando, llevándolos a recorrer vidas pasadas, hasta el momento de la creación de esa alma, su fecha, signo dominante y astros.

    Así su construcción fue entonces más compleja. Verificar vidas anteriores y creación u origen del espíritu, dando resultados con mucha más precisión, sumando las características predominantes y descartando las que no se repiten.

    A todo esto se agregaba la característica de su Guía Espiritual y las del Rayo de Vida por el cual habría descendido, sólo en la primera vida terrena y en la presente.

    Para hacer un pronóstico perfectamente elaborado, se añadían las fechas de nacimiento de sus ascendentes, si las conociera, en caso de tener el consultante, pocas vidas terrestres. Si el individuo es un ser evolucionado, sólo basta contar la primera y la presente, descartando las fechas de su núcleo familiar, ya que su personalidad no será influenciada sino por su nuevas amistades, sólo en lo agresivo, con predominio muy leve, si es pasivo, o marcado, si es agresivo, de la personalidad de sus progenitores y hermanos y por quien sea criado, investigando, a la vez, cuales vidas intermedias influencian en su condición actual.

       Por lo tanto, las diferentes energías del Universo, bajo la interactuación de los astros, tanto físicos como sus paralelos espirituales, las dominaciones de los planos superiores, con su influencia directa o indirecta, superposiciones energéticas o sinergías de otros signos o astros y la influencia de la galaxia correspondiente, son derramadas en el alma el día del nacimiento ya fijado con anterioridad, para ofrecer las condiciones necesarias, forjar su personalidad y todo lo que necesite para su aprendizaje y la tarea que ha venido a realizar, encauzar el destino e intervenir para permitir cumplir ciertos roles o aspectos, facilitando la realización de la misión individual y la colectiva, la que se debe realizar en otros planos de existencia y formar parte de las enseñanzas o experiencias que debemos reconocer para poder eliminarlas, si son adversas o nefastas. 

     Esos defectos adquiridos, proporcionados por los astros, de esta vida y de las anteriores, que a pesar de creer que fueron eliminados, vuelven al presente contraídos por las vibraciones galácticas y planetarias externas, proporcionadas por los integrantes de su constelación familiar. De ser eliminados, puede el alma volver a la forma pura y se asciende en la escala evolutiva.

     Sin estas experiencias sería imposible poder comprender a otras almas que deben atravesar la misma senda. Entre estas, miles serán Altas Entidades que descienden a la tierra, desde siempre, con una tarea específica personal y colectiva, que deben saber quienes fueron para poder comprenderse y reconocerse, porque aquí han de llenarse de impurezas, porque de otro modo, en su forma pura e inmaculada no podrían vivir, debiendo eliminarlas antes de su retorno.

     Esta ciencia disciplinaria aporta entonces en los seres humanos,

·     Un conocimiento exacto sobre la influencia de los astros físicos y espirituales.

·     Poder descubrir habilidades ocultas y sacar provecho de ellas.

·     Poder detectar y corregir los errores o agregados psicológicos ocultos, a fin de mejorar el nivel de vida, logrando buenos resultados, como nuevos aprendizajes.

·     Conocer el grado de evolución, karma, misión terrena y espiritual, individual y colectiva.

·     Comprender nuestra misión terrena y espiritual, para poder llevarla a cabo satisfactoriamente, con el orgullo de haber sido elegido para esa gran tarea especial.

·     Poder conducirnos por la vida, sin tropiezos innecesarios, sin desviarnos de lo que se ha venido a hacer. 

Para más información: EscuelaAtlante@yahoo.com.ar